sábado, 27 de julio de 2013

Lucero

Entonces conocí a “niño”.  Ignoro por qué “niño” insistía en ser niño. Nunca comprendí  por qué quería parecerse más a un niño que a una niña, aunque parecía un niño, siendo una  niña.


Francisco Ángel Noreña

No hay comentarios:

Publicar un comentario