Senderismo: De la Silla de Felipe II a la Machota Baja

Los veranos en Madrid son extremadamente calurosos, por lo que este joven de treinta y tantos años decide construirse una segunda residencia al fresquito de la montaña. Le gusta la falda de la Sierra de Guadarrama, al pie del Monte Abantos, y allí comienzan las obras de su casita. Cada cierto tiempo se acerca por la zona para comprobar como avanza la construcción, y según la tradición, lo hacia desde un singular mirador de piedra que existe en el cercano bosque de la Herrería. Este "jovencito" era el monarca Felipe II, y su pequeña casa el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

Silla de Felipe II

Desde este mirador comenzaremos la ruta. Aparcamos el vehículo junto al kiosco que hay en la Silla de Felipe II,  conviene no llegar muy tarde o tener suerte, ya que el estacionamiento en este punto es escaso. Iniciamos nuestra excursión tomando el camino que nos sale a la derecha del bar y enseguida llegaremos a una construcción de piedra con las ventanas tapiadas (La Casa del Sordo). A su izquierda hay una roca con unas escaleras talladas, desde la que tendremos una esplendida vista.

Saltar valla de piedra

Seguimos el camino que esta marcado con las señales blanca y roja de los senderos de gran recorrido (GR-10), nada mas pasar una barrera metálica de color verde continuaremos ascendiendo paralelos a un  muro de piedra que tendremos a nuestra izquierda. Seguiremos subiendo hasta que una gran piedra nos indica que tenemos que saltar la valla de piedra.

Torno metálico

Continuamos por el sendero, avanzando con el muro de piedra a nuestra derecha, hasta alcanzar unos 400 metros mas adelante, un torno metálico por el que cruzamos el muro. En este punto encontraremos un cartel que nos indica que estamos en una finca privada y las normas para atravesarla (sobre todo tener cuidado con que ese día no haya montería, cosa que se indicara en el cartel anterior nada mas pasar el torno metálico).

Vértice geodésic

Seguimos por el camino que va ascendiendo con mayor pendiente hasta llegar al Collado de Entrecabezas (1.283 m.). A nuestra derecha tendremos la Machota Alta, pero nosotros continuaremos por el sendero bien marcado que continua por la izquierda. Seguiremos subiendo de forma suave entre jaras y rocas, por un estrecho camino señalizado con hitos. En poco tiempo alcanzaremos la Machota Baja. En su cima tendremos un vértice geodésico y una especie de urna metálica cuyo interior guarda un cuaderno y un bolígrafo donde los senderistas dejan sus comentarios.


El regreso lo realizamos por el mismo camino. La distancia recorrida es alrededor de 7 kilometros (ida y vuelta), se puede hacer sin prisas en unas cuatro horas y no presenta ninguna dificultad.