Entre estas paredes verticales, repletas de vegetación diversa y musgo, a veces se descuelgan hermosas cascadas, siendo la más espectacular la que hay casi al final del recorrido, tanto por su altura como por su caudal, que cae desde el interior de una gruta situada a unos 10 mts. de altura.
Poco después la senda finaliza al adentrarse en una cueva de la que brota el agua que en parte alimenta al arroyo. Aquí toca volver sobre nuestros pasos para disfrutar otra vez de esta maravilla natural, esta vez desde la perspectiva contraria. Cuatro kilómetros ida y vuelta que recordaremos siempre por la magnitud de su belleza.
Seguimos recorriendo en coche estos verdes valles y montañas del Pirineo francés, donde al agua aparece por todos los rincones, hasta llegar a la localidad de Larrau donde, siguiendo las indicaciones del espacio natural llamado "Holartze", llegaremos hasta un parkin donde dejamos el vehículo para echarnos a andar por una senda que, en 2,5 kmts., nos dejará en la "Pasarela de Holartze", un espectacular puente colgante de 50 metros de largo que salva un desfiladero de 200 de profundidad. No apto para los que tengan vértigo. Cinco kmts. ida y vuelta de cierta dificultad, pero sin llegar a ser demasiado duros, y que bien merecen la pena.
De vuelta a Larrau tomamos la carretera que nos devuelve a España por el puerto del mismo nombre, en cuya cima y alrededores, y si el día está claro, tenemos grandiosas panorámicas. También nos puede suceder que los valles estén cubiertos de niebla y este alto se encuentre con buena visibilidad, quedando el mar de nubes por debajo nuestro, recordándonos esta vista a la que tenemos cuando viajamos en avión.
Entrada a la Garganta de Kakueta |
Final de la Garganta de Kakueta |
SALUDOS
EL RURAL
... / ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario