sábado, 4 de mayo de 2013

Revelarse


“Aunque esté más oscuro, yo te aseguro que de noche es mejor. Pues tocando las formas, se olvidan las normas y se enciende el valor”. Es el estribillo de una canción que escuché a los dieciocho años y que desde entonces como mi pluma, me acompaña allá adónde voy. La oí en la radio por causalidad a altas horas de la madrugada. A esa edad mi cuerpo obedecía a las exigencias diurnas. De día vivía calada por un incesante aguacero de problemas para el que no tenía impermeable y por la noche empapada sólo buscaba el cálido sueño. Mi compañera de habitación era todo lo contrario el crepúsculo la engullía. Una tarde mi amiga decidió que esa noche yo compartiría su insomnio y me puso la radio. Ahí estaba él, Carlos, el locutor. Su voz desde el primer susurro cubrió mi mente con hilos de fantasía y me lanzó directa al planeta de los soñadores.
Carlos me presentó como buen celestino a mi primera amante. La noche. Al ocaso me entregué en cuerpo y alma. En sus sombras perdí la virginidad. La noche desgarró el himen de mi rutina y suavizó la dureza reflejada en mi rostro por el peso de las preocupaciones. Desde entonces he buscado su invisibilidad en diferentes épocas de mi vida para liberar mis temores, mis deseos más íntimos y para hundir en la oscuridad de sus ojos mi vergüenza. Con ella he amado. Ha sido mi trío perfecto. La noche, mi bajo y yo. En la claridad del día he intentado reemplazarla con otros amantes disfrazados de noche. Cuartos oscuros, ropa negra, cines lúgubres de barrio. Pero nada ha podido suplantarla. Ella es la única que me calma.
Ahora que tengo esa edad a la que puedo mirar a la muerte a los ojos porque ya no me  intimida sé que quiero disfrutar aún más de ella. Quizás lo deje todo y persiga la noche hasta su guarida, ese sito en el que la noche nunca se apaga. El círculo polar ártico. Para que en esa negrura invernal se revele el negativo de mi persona.

Avería

1 comentario:

  1. La noche es una amante fiel, también la soledad, pese a que cada una ama a muchos a la vez.

    ResponderEliminar

Licencia Creative Commons
La siguiente la pago yo por Rick, Diógenes de Sinope y Albert se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.